Realizamos una recopilación de los métodos más habituales de viajar con nuestros animales, si tienes que viajar con tu gato o perro en coche, estate atento a las siguientes recomendaciones:

¿Hay una ley que lo regule específicamente?

Al respecto, el Reglamento General de Circulación no explica de forma explícita cómo llevar de forma segura a un perro o a otro animal de compañía en el coche.

El art. 17 del reglamento general de circulación dice:

“Los conductores deberán estar en todo momento en condiciones de controlar sus vehículos o animales. Al aproximarse a otros usuarios de la vía, deberán adoptar las precauciones necesarias para su seguridad, especialmente cuando se trate de niños, ancianos, invidentes u otras personas manifiestamente impedidas” (artículo 11.1 del texto articulado).

El art. 18:

“El conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción, que garanticen su propia seguridad, la del resto de los ocupantes del vehículo y la de los demás usuarios de la vía. A estos efectos, deberá cuidar especialmente de mantener la posición adecuada y que la mantengan el resto de los pasajeros, y la adecuada colocación de los objetos o animales transportados para que no haya interferencia entre el conductor y cualquiera de ellos (artículo 11.2 del texto articulado).

Ante esta afirmación, los animales deben estar bien sujetos. Para ello, en el mercado existen varios dispositivos.

Recomendaciones generales

Teniendo en cuenta tu propia seguridad y la de tu animal de compañía, resulta recomendable otra serie de trucos y consejos que pueden hacer mucho más agradable tu viaje y el de tu gran amigo.

– Evita que se maree: los animales también pueden sufrir ansiedad, estrés y nerviosismo, ya que son sensibles al movimiento. Un truco: si observas que tu perro babea en exceso, puede ser un síntoma de que se está mareando. En este caso, lo más recomendable es parar en la estación de servicio próxima y sacarlo del coche para que tome un poco el aire. También puedes comentarlo con tu veterinario que te dará las recomendaciones necesarias, y, en algunos casos medicación para evitar el mareo. Tened en cuenta que a los perros y gatos no les vale la “Biodramina”.

– Para los gatos existen feromonas que puedes utilizar en spray, tanto en el transportín como en el coche.

– Lleva sus enseres personales: Además de su comida y agua (sobre todo ésta última, para evitar que se deshidrate), intenta llevar siempre sus objetos personales, tales como cepillo, algún juguete, una manta para que se acomode y medicinas en el caso de que esté tomando algún tipo de tratamiento.

– Nunca lo dejes encerrado: Aunque te parezca increíble, muchos fatales sucesos han llevado a muchos conductores imprudentes y despistados a dejar encerrados en el coche a su perro o mascota. Si esto se produce en pleno verano y con el coche aparcado al sol, el resultado puede ser trágico. Por ello, siempre que pares a descansar en tu largo viaje (la DGT recomienda parar cada dos horas o cada 200 kilómetros… incluso los coches más modernos ya disponen de sistemas que te avisan para hacerlo), saca a tu mascota para que se airee, juegue, beba y coma. En definitiva, trátalo como a un miembro más de tu familia.

– Protege la tapicería: con mantas o incluso pequeñas cajas o canastos que, además, pueden resultar muy cómodos para tus mascotas.

– Que no asome la cabeza: Además del peligro de seguridad existente por la distracción hacia el conductor, el animal también se puede dañar al golpearse con una rama si existen árboles en los aledaños de la calzada. Asimismo, por efecto del viento, tu mascota puede contraer otitis o conjuntivitis.

Dispositivos de transporte de mascotas

La buena elección de uno u otro dispositivo para llevar a tu mascota de forma segura en el coche, dependerá del tamaño del animal, de si tienes uno o varios, y de la frecuencia con la que viajes con ellos.

1. Correas de cinturón

Las correas de seguridad se fijan al enganche del cinturón. Por ello, sirven para cualquier vehículo. No obstante, nuestra mascota puede sufrir lesiones en caso de accidente, si no le incorporamos un arnés de seguridad. Hay cinturones que lo incorporan y otros que no, necesitando su adquisición por separado. Siempre tenemos que tener en cuenta el peso de nuestro perro y asegurarnos de que el dispositivo lo aguante bien. Las correas tienen un tallaje, aunque algunas permiten ajustar su extensión.

2. Transportín

Las cestas o trasportines sólo sirven para animales pequeños y medianos. Son muy útiles para llevarlos en el coche, pero también para usarlos en otros medios de transporte. Estas cestas están fabricadas en tela o plástico y en función del material y el tamaño, la variación del precio es importante. Para perros de pequeño tamaño y gatos, los transportines se deben colocar dentro del habitáculo, concretamente sobre el suelo detrás de los asientos delanteros. Nunca se debe colocar un transportín sobre el asiento sujeto por un cinturón de seguridad, ya que las pruebas realizadas ponen de manifiesto que la caja se rompe y la mascota sale despedida a través de la pared del transportín.

3. Red

La red de separación para el habitáculo es un sencillo sistema de tela que, fijándose por abajo a los enganches predispuestos en el coche para fijar la carga, separa el maletero del habitáculo, o incluso los asientos delanteros de la banqueta trasera. Para sujetar la parte de arriba, el accesorio necesita enganches para la ventana, los asideros de mano, o instalar un enganche en el interior. No todas las redes incluyen estos fijadores.

4. Barrera de metal

Las barreras protectoras, al igual que las redes, dividen el habitáculo entre los asientos delanteros y los traseros, o estos últimos con el maletero. Deben respetar la normativa DIN (75410-2) y son muy recomendables para coches antiguos, debido a la debilidad que presentan muchos asientos para retener la carga en un supuesto accidente. Su montaje es sencillo, gracias a unos soportes variables en extensión.

5. Jaula

Las jaulas hacen las veces de un transportín, pero sólo sirven para el coche o un carro anexo al vehículo mediante la bola de remolque, y no para el transporte público —como por ejemplo, sí que valen las cestas—. La principal ventaja de la jaula frente al transportín es su tamaño y robustez; algunos son aptos para perros muy grandes tales como el mastín. Son muchas las jaulas que permiten plegarse tras su uso.

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